Nuestro Administrador de Fincas en Alicante se implica en cualquier asunto que suceda en la Comunidad de Vecinos: desde los asuntos más sencillos, hasta los problemas más graves.
La figura de nuestro Administrador es clave porque actúa como puente entre las partes implicadas. Hoy hacemos hincapié en los conflictos cotidianos a los que suele enfrentarse:
Conflictos cotidianos a los que se enfrenta nuestro Administrador de Fincas en Alicante:
– Ruidos
Los ruidos es uno de los conflictos cotidianos a los que más suele enfrentarse nuestro Administrador de Fincas. A veces es suficiente con llamar a la policía, pero lo habitual antes de llegar a ese punto es consultar al Administrador. Este pondrá en sobre aviso a los infractores y si no hacen caso, procederá a través de protocolos determinados para acabar con el problema.
– Reformas
Hacer obras es otro de los conflictos cotidianos a los que suele enfrentarse nuestro Administrador de Fincas. Normalmente la solución es simple, pero lo mejor es que te dejes asesorar por un Administrador colegiado, ya que este puede proceder con total conocimiento de causa.
Es importante tener empatía y ponerse en lugar de los vecinos. Hay que valorar hasta qué punto interesa entrar en un conflicto. El administrador podrá valorar la situación y buscar la solución más adecuada.
– Uso de las zonas comunes
Existen muchas situaciones en torno a las zonas comunes que pueden convertirse en conflictos a los que suele enfrentarse nuestro Administrador de fincas en Alicante. Algunas de ellas son: ensuciar, romper elementos comunes, etc. Aunque pueden darse situaciones más complicadas incluso.
Si la situación es de difícil resolución nuestro Administrador de Fincas actuará de intermediario con los estatutos de la comunidad y la ley en la mano, aportando a su vez su experiencia y conocimientos.
– Animales
Otro de los conflictos cotidianos a los que se enfrenta nuestro Administrador de Fincas en Alicante tiene que ver con los animales de compañía o mascotas. En estos casos nuestro Administrador suele trasladar un mensaje de conciliación entre las partes implicadas, aunque a veces no es fácil.
Si se trata de un asunto de especies invasoras, de un domicilio con demasiados animales o de un mal uso de las instalaciones comunes a causa de los animales, la cosa cambia. El administrador podrá intervenir y recurrir a las leyes existentes al respecto.
– Morosidad
Este es uno de los problemas cotidianos más difíciles a los que suele enfrentarse nuestro Administrador de Fincas. El administrador tiene la responsabilidad de enfrentarse a la morosidad. No solo actuará como intermediario, sino que será una parte esencial y activa en la resolución del problema.
Si en tu comunidad de vecinos sucede alguno de estos conflictos con reiteración y aún no cuentas con un administrador de fincas, contacta con nuestro despacho de Administración de Fincas en Alicante, podrás evitar muchos problemas. Lo mejor es que el Administrador de Fincas esté colegiado. Este tipo de profesionales están perfectamente cualificados y disponen de toda la información actualizada, correspondiente a la comunidad.
A modo de conclusión: nuestro Administrador de Fincas en Alicante abogará por mediar en cualquier conflicto que surja en la comunidad.
