Desde que se decretó el estado de alarma hace ya tres mes, las comunidades de vecinos han tenido que adaptarse a las medidas de prevención impuestas por el gobierno, que incluyen cerrar espacios comunes y adoptar medidas de limpieza extrema.
Con el comienzo de la desescalada, las comunidades de vecinos tienen que seguir adaptándose y seguir ciertas pautas para reducir al mínimo los contagios en las fincas.